
Este ejercicio es especialmente útil cuando te sientes asaltado por pensamientos o emociones desagradables. Puedes luchar contra esa sensación, lo cual es bastante inútil, o elegir bailar con ello... ¡bajo la lluvia!:
Reconoce la presencia pensamientos, emociones, sensaciones, recuerdos, deseos…
Acepta lo que piensas o sientes, sin resistirte a ello ni negarlo.
Investiga cómo esto se refleja en tu cuerpo.
No te identifiques con lo que aparece. Recuerda que “tú” eres más que tus pensamientos, tus emociones, tus recuerdos o tus deseos…
De este modo te sitúas “un paso atrás” y ves la situación de manera diferente, con una mayor libertad y desapego que te permiten elegir una respuesta consciente, frente a la reacción automática establecida por tus condicionamientos y recuerdos emocionales.
Puedes acceder a un audio de esta meditación (guiada por Silvia Fernández, de Nirakara, aquí)
Práctica del curso de Mindfulness de la Escuela de Desarrollo Transpersonal (E.D.T)